Con la mira en el título

Los cubanos Despaigne y Barthelemy tienen hoy peleas clave

JORGE EBRO
jebro@elnuevoherald.com

Yordanis Despaigne no ha olvidado el amargo sabor de la derrota, la visión de la mano levantada del oponente en señal de victoria y el descenso del ring con el sueño del invicto roto.

Pero esa batalla perdida no significa la capitulación en la guerra por la vida encima del ring, y el cubano (8-1, 4 KO) se ha prometido a sí mismo hacer todo lo posible por evitar ese sentimiento de fracaso, cuando hoy enfrente en el Cosmopolitan Hotel and Casino al colombiano Edison Miranda (34-5, 29 KO).

“Aprendí mucho de la pelea anterior y de mis errores’’, expresó Despaigne desde Las Vegas, donde tendrá lugar la cartelera que será transmitida a todo el país por ESPN2, a partir de las 10 p.m. “Esa vez me fajé, pero no utilicé mi mejor boxeo y caí en la trampa de mi rival. Ahora todo será distinto’’.

Ciertamente, en su actuación previa Despaigne fue superado –más con inteligencia que con pegada- por Ismayl Sillakh, quien mantuvo al cubano a distancia con un jab incesante y combinaciones rápidas que lo sacaron de concentración y le hicieron perder la paciencia, la cordura y el invicto.

Miranda es un púgil experimentado, que repartió nocauts a granel mientras peleó en divisiones inferiores, pero que se ha mantenido como un retador perenne al que le falta el asalto final a la gloria. A pesar de todo, Despaigne tendrá que cuidarse mucho de la pegada del colombiano y seguir un tren de pelea inteligente contra un hombre que ha prometido llevarle a la lona y casi retirarlo del deporte.

Medio en broma y medio en serio, el cafetero pidió que la pelea no la transmitieran en tercera dimensión -3D-, porque “la cabeza de Despaigne podría terminar en la sala’’ de los televidentes.

“Despaigne tuvo un rival difícil en Sillak y ahora tampoco Miranda le regalará nada’’, afirmó Luis De Cubas, quien junto a Caribe Promotions conduce la carrera del antillano. “Pero en esa misma derrota demostró que tiene el corazón de un guerrero. Nunca se rindió, luchó hasta el final y eso le ganó el reconocimiento de los conocedores del boxeo. Creo que ahora tiene una buena oportunidad para relanzar su candidatura a un título mundial’’.

Para el ligero pesado cubano será su cuarta presentación en ESPN.

Al menos, Despaigne tendrá cerca a un compatriota suyo, Rancés Barthelemy (12-0, 10 KO) , quien estará combatiendo por un título regional contra el mexicano Gerardo Robles. Un triunfo para el junior ligero cubano significaría un paso importante en su todavía joven carrera.

“Es una oportunidad que no pienso desperdiciar, porque Las Vegas es la meca del boxeo y puedo abrir muchas puertas’’, dijo Barthelemy. “Si todo va bien, este triunfo me colocaría ya en las clasificaciones y serviría de punto de partida hacia una futura pelea de título mundial’’.